Este sábado 23 de febrero Jorge «El Picante» Bermúdez (3-1, 1 KO) dio la sorpresa y le ganó al invicto boxeador Agustín «Sugar» Quintana (8-1, 5 KO) en la ciudad de Alvarez, departamento de Rosario. Una pelea encuadrada en Super Ligeros a seis rounds.
Bermúdez fue de punto. En una división demasiado pesada para él. Fue para que le peguen una buena paliza y devolverlo hecho una «chatarra» para la querida y lejana ciudad de Concordia. Dio una de las mayores y mejores victorias de los últimos tiempos para el boxeo local. Encima después ganó «El Perrito». Que noche «Tete» que tuvimos…
«El Picante» fue siempre para adelante con una guardia cerrada, castigo siempre con la zurda abajo y la diestra voleada todos los primeros rounds. Fue quien trató, se desgasto y trabajo con mucho más esfuerzo que su rival. En defensa «barrió» muy bien o bloqueo casi todos los pocos contrataques de su apático e inactivo rival. «Sugar» nunca le imprimió suficiente violencia para ganar los tres primeros. No se sintió bien con el planteo de su «goloso» rival…
En la vuelta cinco un ascendente de Quintana casi desmorona a Jorge. Cuenta de protección para «El Pica». Casi que se le «cae el sistema». Aguantó unos cuantos «uppercuts» más, pero puso «huevos» y siguió en pelea con mucho amor propio y admirable capacidad de recuperación. No se entregó porque él no sabe hacer eso. No tiene esa conducta en el «chip». No es una opción abandonar. El que renuncia no tiene premio. Fue un round desesperante y lleno de angustia para todos.
Luego se recupero y encontró nuevamente el ritmo y soltó las manos con muchas ganas y gran preparación física y mental. Estaba a punto caramelo para «cerrar bocas» que no saben de lo que están hablando. El único que tenía «espíritu guerrero» era Jorge Abel Bermúdez del barrio Almirante Brown.
El otro no tenía ganas y estaba vaciado de «fuego sagrado». Ni pudo ni quiso terminar con el golpeado y gastado rival. No le dio el «pesto»… Se le escapo «una vaca del baño». No fue una pelea desnivelada ni ahí, fue competitiva y desgastante. Quintana pega fuerte y es mucho más grande.
Rivero Promotions, Quintana y TYC en este caso son la misma cosa. Un negocio deportivo que hay que vender con jóvenes y dulces figuras (por algo de dicen «Sugar»). Hay que generar campeones que sean referentes y que cautiven a la banda. Los periodistas de TYC Sports decían así: «Buena mano de Quintana (cuando solo lo rozaba)». «Gran derecha del invicto (cuando fue bloqueada o amortiguada por los guantes del «Picante)».
No voy a decir que se pongan anteojos o que sufren de estigmatismo grave y progresivo. Voy a decir que es su trabajo difundir y promocionar a interesantes proyectos. Y tratan de sensibilizar y vender el producto boxeo, como una actividad física que desata referentes deportivos jóvenes y exitosos, que desata drama, emoción, alegrías y tristezas. Todos los sentimientos juntos sobre el cuadrilátero. Y la gente queda subjetivada por los relatos y los comentarios. Por eso siempre les digo los mismo: No escuchen ni lean a cualquier «loquito» que ande dando vueltas con un micrófono en la mano… Cuiden su salud mental «gurises» ustedes…
Siempre junto al box…
LA LEY DEL BOXEO (MARTES 20 HS ACTIVA 98.9 Y WWW.ACTIVACONCORDIA.COM).
